Participar en una sesión de constelaciones familiares fue una experiencia profundamente reveladora. Un verdadero viaje emocional, donde cada sensación me llevó a una nueva comprensión sobre mí misma y mi historia. Cada momento valió la pena por el aprendizaje y la claridad que obtuve.
Agradecida con Rudolf Behrens, por esta oportunidad de crecimiento y sanación